Ir al contenido principal

Con el crudo en las bodegas...

Es hoy, un jueves muy lluvioso.
en esta parte del globo, en el sur, es invierno y de agosto, igual que en otro lado del hemisferio, pero allá el calor es tan fuerte como los veranos que tenemos aquí, con la diferencia que con mejor estandar de vida.
Sigue lloviendo, ahora es mas de noche, el cocinero está preparando la salsa y nuestro barco sigue el compás de unas olas que, si bien están agitadas, se está bastante bien.
Hasta el martes a la noche, seguiremos anclados con el barco en estos puertos de América del sur o Sud América, pronto zarparemos hacia Europa.
Bueno, los dejo, mañana u otro día seguiremos compartiendo este Cuaderno de Bitácora.
El Capitán Jordi Montserrat.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Querido Capitán...nosotros desde la costa agitaremos nuestros pañuelos y de paso secaremos las lágrimas que se refugien en él por su partida. Con los ojos húmedos de tristeza lo veremos zarpar...y con esos mismos ojos inundados de emoción esperaremos volver a verlo, acá, allá, qué más da...los barcos van y vienen, los recuerdos quedan, los amigos siempre estarán...
Hasta cualquier momento...
Una Pirata amiga que la vida le dio.
Anónimo ha dicho que…
Corazón de Polizón: estoy ansiosa por saber cómo sigue esta historia. Siga escribiendo que es muy interesante este viaje.
Fuerza!!!
Anónimo ha dicho que…
la canço sembla que diu:
jo d'aqui m'en vull anar, que l'anyorament m'hi mata....
tu saps de aixo que estic parlant
una abraçada molt, molt forta
fins sempre!
checha

Entradas populares de este blog

Dos meses en la románica, olímpica y catalana.

No se como se debe ver desde afuera lo que existe. Como se aprecia o como se puede sentir y hasta a veces imaginar como son las cosas que uno desconoce por no haberlas sentido, tocado, olido, sufrido, caminado, sentir en la piel esa brisa del mar, o el mistral de la montaña, o los olores própios de una mañana con jazmines que me remontan a la esquina de las calles 9 de julio y Amenabar, o a la de una de las callejuelas de esas que tanto suben y bajan en Manresa, el interior de Catalunya. O ese constante traqueteo del tren de madrugada de vuelta de Castelldefels (dicen que significa Castillo de fieles, los fieles serían en este caso las torres desde donde se vigilaba y actualmente queda un solo Fiel en el medio de la ciudad), lo que es la compañía de un desconocido, esa compañía que solo te puede dar las ciudades en la que nadie conoce a nadie, nadie sabe quien sos, ni le interesa saberlo, pero si le hablás seguramente te responderá con mucha educación y si es necesario será solidario c...

El 2008 viene marchando...

Hoy, ahora, en este momento son las 18:25 hs. Es un atardecer bastante frío en la ciudad de Barcelona, pegado al Mediterráneo y al otro lado las montañas. Ya 2008 en unas horas. Lo que les puedo decir queridos polizones es que este ha sido un año muy intenso en lo personal, tanto en su comienzo como en su final. Un año de muchos cambios, de muchas transformaciones, de muchas pérdidas, de muchas apariciones en el escenario de la vida, disgustos, alegrías y según pasan los años cada uno de los acontecimientos que nos muestra la vida nos afecta de mayor manera y otras no. ¿Una cosa positiva? Aprender de verdad lo que valen los amigos con los que compartimos momentos de desconsuelo, de desamor, de dudas, de rabia, de alegrías, de mucho dolor, de incertidumbre o de simplemente estar por estar, por estar con él, con ella, con la peña, la barra o el grupo o con tu amigo o amiga a quienes querés como tu mismo hermano o hermana. Por eso, queridos amigos, a los que estén leyendo les mando un abr...

...es bandera de niebla su poncho al viento...

Esta mañana me levanté con una rara sensación de optimismo, cosa que en estos últimos tiempos no me viene ocurriendo, y al mismo tiempo cuando estaba despertando y preparando el mate para desayunar con croissant me acordé de un lugar del cual ya he visitado dos veces y es increíble como una canción te puede cambiar la escenografía automáticamente ¿no? Este lugar está cerca del casal argentino de Barcelona, a la vuelta digamos, a una cuadra de la estación de metro número 5, “La blava” (La azul). El lugar desde fuera parece cualquier bar o café de cualquier ciudad, puede ser de Santa Fe, de Buenos Aires, Madrid, Santiago de Compostela o de la mismísima Barcelona. Pero el secreto se devela cuando abrís la puerta del local… … olor a carne, una pizarra que dice “Empanadas tucumanas €.0, 75”, seguís mirando un oco más el menú y dice, “¡Flan con dulce de leche!” ¡Joder con la nostalgia! Y después todo el resto de los platos, platos argentinos. Bueno, es evidente que estoy en un lugar argentin...